Cuando uno está ante una situación en la cual, el/la empleador/a lo despide sin justificación alguna, se está ante un caso de despido arbitrario. En este caso el/la agraviado/a puede plantear su denuncia ante la comisaría y luego retornar al centro de trabajo junto con un/a policía para constatar el hecho. Posteriormente debe buscar un/a abogado/a especializado/a en materia laboral para que redacte e interponga la demanda laboral por despido arbitrario. El/la trabajador/a debe centrarse en buscar aquellos documentos que le permitan probar que existía una relación laboral con la empresa.
Además de acudir a la comisaría más cercana, el/la trabajador/a puede denunciar el caso en la Fiscalía, alegando que ha sido víctima de un despido arbitrario que tiene como causa una actitud discriminadora.
Por otro lado, la/el denunciante podrá remitir una copia de la denuncia contra la institución a la Dirección General de Lucha contra el Racismo y toda forma de Discriminación del Viceministerio de Descolonización, del Ministerio de Culturas para fines de registro y seguimiento.